No penséis que las subo según hago la relectura, porque las frases las tenía apuntadas de la segunda vez que me leí los libros hace un año, justo al acabar la saga.
Empiezo con las de Harry Potter y la Piedra Filosofal:
-No me he ruborizado tanto desde que la señora Pomfrey me dijo que le gustaban mis nuevas orejeras.
-Tía Petunia decía a menudo que Dudley parecía un angelito. Harry decía a menudo que Dudley parecía un cerdo con peluca.
-Allí, en Stonewall meten las cabezas
de la gente en el inodoro el primer día, ¿quieres venir arriba y
ensayar?
+No gracias... Los pobres inodoros
nunca han tenido que soportar nada tan horrible como tu cabeza y
pueden marearse.
-¿Ah, el pequeñito Ronnie tiene algo
en su naricita?
-No llores Ginny vamos a enviarte
muchas lechuzas.
+Y un inodoro de Hogwarts.
-Rayo de sol, margaritas, volved
amarilla a esta tonta ratita.
-¡Papanatas! ¡Llorones! ¡Baratijas! ¡Pellizco!... ¡Muchas gracias!
-¿Y si levanto mi varita y no sucede
nada?
+La tiras y le das un puñetazo en la
nariz.
-Ron dejó caer su varita. ¿Hermione
Granger diciendo una mentira a su profesora?
Hermione era la última persona que
haría algo contra las normas, y allí estaba fingiendo una
infracción para librarlos a ellos del problema. Era como si Snape
empezara a repartir golosinas.
-¡Mira esto! Me han enviado regalos.
+¿Qué esperabas, nabos?
Percy también llevaba un jersey bajo
el brazo.
-¡P de Prefecto!
-No juegues.
+Diles que estás enfermo.
-Finge que se te ha roto una pierna.
+Rómpete una pierna de verdad.
-Puedes fingir que estás esperando al
profesor Flitwick, ya sabes como: Oh profesor Flitwick, estoy tan
preocupada, creo que tengo mal la pregunta catorce b...
-Deberían cambiar las reglas. Flint ha
podido derribar a Harry en el aire.
A Lee Jordan le costaba ser imparcial.
-Entonces... después de esta obvia y
desagradable trampa...
+¡Jordan!-lo regañó la profesora Mc
Gonnagall .
-Quiero decir, después de esta
evidente y asquerosa falta.
+Jordan no digas que no te aviso.
-Muy bien, muy bien. Flint casi mata al
buscador de Gryffindor, cosa que le podría pasar a cualquiera, estoy
seguro.
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